Los hombres de hoy desconocen la esencia
de las cosas. Han perdido la relación con el sentido de la vida y de la creación del mundo (…) la libertad consiste en la capacidad del hombre para crear una nueva causalidad = libertad = autodeterminación = creatividad = arte = hombre.
Joseph Beuys, 1985
ARTE + TECNOLOGÍA
(FOTOGRAFÍA+DANZA+DISEÑO DE SONIDO+VIDEO)
Tratado sobre el aura reflexiona poéticamente sobre la dualidad de toda existencia, la polaridad que domina nuestras vidas, los opuestos enlazados por diferencias de grado, haciendo foco en el par:
luz y oscuridad. Aludiendo metafóricamente de la recuperación o creación de nuestra propia luz, nuestro “halo” (en tanto conocimiento, sabiduría y energía positiva) que se ha perdido con nuestros modos de vida egoístas, consumistas y poco empáticos con el medioambiente.
Reflexiono acerca de la pregunta ¿hemos fracasado como especie?, entendiendo que tiene significados opuestos para los seguidores y detractores de los sistemas actuales de consumo, para aquellos que buscan el crecimiento económico a cualquier precio y aquellos que priorizan la salubridad del medioambiente y las especies. ¿Somos seres de luz? ¿Somos seres oscuros? Somos ambas cosas, pero vivimos hoy un tiempo opaco y lóbrego para la vida natural.
La pieza muestra una gran paradoja, la tecnología, un elemento exterior, hace visible aquello que hemos perdido en nuestra naturaleza, nuestra propia luz. Procesos físicos artificiales se fusionan a los fisiológicos, a través de receptores y cables de cobre en contacto con la piel (que continúan la estructura fractal del sistema nervioso). Estos se unen a un dispositivo tecnológico (microcontrolador + bluetooth), los estímulos de nuestro cuerpo (impulsos nerviosos y señales eléctricas) son leídos y transmitidos de un emisor a un receptor.
Leds ubicados en el receptor reciben señales que las activan. El ciclo se completa, nuestro alimento crece gracias a la luz del sol, esa energía se transforma, en nuestro cuerpo, en impulsos nerviosos que a su vez encienden nuevas luces, la luz genera nueva luz. Estas luces son metáfora del aura, de nuestra luz interior, incluso de la aureola, otrora reservada a los principales astros luminosos y personajes santificados.
Así también de un nuevo entendimiento de nosotros y de los demás, de la necesidad de repensar nuestra relación con el entorno y otros seres, desde la responsabilidad personal, disociada de designios divinos y propósitos religiosos.
Al capturar fotográficamente el movimiento de la luz en la persona receptora, se deja una impronta, una huella de la entrega, un registro del “aura” que simboliza el interior. Nada es estático, las energías de los dos seres se concatenan, fluyen y se influencian. El entramado simbólico de la propuesta, enlaza sistemas de creencias, tecnología y ciencia, trasladándolas a un plano visual metafórico, buscando reflexiones acerca de nuestras acciones como especie, las relaciones naturaleza/artificio y sus visibles consecuencias.
Clarisa Menteguiaga 2022
Todo es dual; todo tiene polos; todo tiene su par de opuestos; semejante y desemejante son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado: los extremos se encuentran; todas las verdades no son sino medias verdades; todas las paradojas pueden ser reconciliadas.
El Kybalion